Limpieza Hepática
Durante los seis días
- Tomar cada dia 1 litro jugo de manzana ( licuado o comprado) o dos gramos de acido málico en medio litro de agua bebiéndolo durante el dia. 1kilo y medio de de manzanas
- Enjuagar boca con bicarbonato o cepillar dientes seguido ( por el acido de la manzana )
- Evitar bebidas Frías, lácteos, productos animal y fritos.
- Preferentemente que coincida con luna llena o nueva o cambio de estación.
Opcionales
1- limpieza bucal hepática con aceite de girasol o sésamo de 1era prensa (buches y escupir)
2- Tomar Zumo de aloe en ayunas ayuda a procesar antiguos desechos NO tomar antes o después del día de limpieza profunda.
- Limpiar colon antes (el sexto día) y después de la limpieza ( noveno) Esto es sumamente IMPORTANTE ya que con este procedimiento se limpia el intestino de residuos y se eliminan las piedras.
Opciones LIMPIEZA de COLON:
· Hidroterapia o Colema Board
Como fabricar el colema Board
· Sales de epson ( sulfato de magnesio ) (1 cucharadita en un vaso de agua tibia) Tomar primera hora de la mañana
· Aceite de ricino ( 1 a 3 cucharditas en 1/3 de agua tibia en ayunas o por la noche antes de dormir )
· Shankprashalana: 2 litros de agua hervida con 1-2 cucharadas de sal. Calentar el agua y luego agregar la sal.
( ver imagen anexa Ejercicios)
Tomar dos vasos de agua con sal y realizar los ejercicios y así sucesivamente hasta completar 8 vasos o hasta que el agua salga como entro.
Dia de la LIMPIEZA o sea el séptimo día.
Se necesitara:
- Cuatro vasos de solución magnesiana: Preparación: Verter en un recipiente 4 cucharadas soperas y tres vasos de agua. Revolver y repartir en cuatro porciones.
- Segunda preparación: ¾ vaso de jugo pomelo (limón o naranja)sin pulpa y ½ vaso de aceite de oliva(Extra virgen )
Si hay hambre se aconseja comer avena o cereales o fruta y zumos.
½ dial almorzar liviano .
Después de las 2 NO comer mas. Solo agua!!!!
18 hs: Tomar el primer vaso magnesiano. Se puede beber con pajita para evitar el sabor amargo. Aquellos que tengan intolerancia al sulfato o a su sabor amargo, pueden optar por el citrato de magnesio, que resulta menos amargo. Se puede beber agua encima del vaso de solución ingerida.
20 hs: Tomar el segundo vaso magnesiano.
21,30 hs: Si aún no se produjo alguna evacuación, hacer una pequeña enema o ducha rectal, a fin de estimular el proceso de eliminación.
22 hs: Tomar la emulsión pomelo/oliva. Se aconseja prepararla en un frasco de vidrio con tapa (son ideales los utilizados para envasar mermeladas), agitando unas 20 veces la mezcla de ¾ vaso de jugo de pomelo exprimido y ½ vaso de aceite de oliva extra virgen. Asegurarse de no tener que realizar ninguna otra actividad posterior a esta toma. Beber la emulsión de pié (se puede beber también a sorbos o con pajita), luego acostarse de inmediato boca arriba (con la cabeza alta, sobre una buena almohada) ó en posición fetal sobre el lado derecho. Apagar la luz y concentrar la atención para intentar percibir el movimiento de los cálculos en el hígado.
6 hs: Levantarse y tomar el tercer vaso magnesiano. Luego se puede beber agua si hay sed. Tratar de permanecer levantado, evitando volver a la cama.
8 hs: Tomar el cuarto y último vaso magnesiano. Con esto se da por concluida la limpieza.
10 hs: Reiniciar el ciclo alimentario bebiendo algún jugo natural y posteriormente alguna pieza de fruta fresca.
11 hs: Comenzar con alimentos sólidos, en poca cantidad; seguir varios días con dieta liviana.
Nunca limpie su hígado durante una enfermedad aunque sea un simple resfriado, pero si sufre una enfermedad crónica, hacer la limpieza puede definitivamente ayudar a encontrar la salud.
Shank Prakshalana
Es una purificación, limpieza—esta dentro de Pranayama—es un Kriya dentro de los Shat Karmas (seis ejercicios purificadores)
Puedo realizarlo en cada cambio de estación o cada 6 meses o una vez al año.
La preparación previa va a depender de mi alimentación habitual, si no como carne se puede hacer tan solo seis días de preparación más el ayuno. ( O sea en lugar de tres días tan solo dos de cada alimentación)
El día siguiente al ayuno. Hervir 4 litros de agua, apagar el fuego y salarla una cucharada sopera rasa por litro de agua (para que no sea absorbida el agua por osmosis por la mucosa, y evacuada por vía normal de orina, se sala) espero que el agua entibie o caliente bebible.
Tomar dos vasos de agua salada seguidos y realizar los ejercicios.
Tomar otros dos vasos de agua salada y repetir los ejercicios..
Tomar otros dos vasos de agua salada y repetir los ejercicios.
Sentarme en el baño y esperar que se produzca la evacuación, si no se produce repetir los ejercicios y agregar sarvangasana.
Si aun no se produce la evacuación hacer un baño asiento de agua fría por 5 minutos.
Si aun no se produce realizar enema.
A partir de la primera evacuación proseguir con dos vasos de agua salada - ejercicios –evacuación hasta completar los 12 vasos de agua salada con las correspondientes evacuaciones o hasta que el agua salga tan limpia como entró.
Luego pasar 45 minutos sin beber agua, recostarse tapado y descansar, no tomar frío.
Ingerir arroz blanco bien cocido, con ghee o aceite de uva, beber agua o infusión..... comer no dejando pasar mas de una hora y media.
DIA de descanso.
A continuación vera una lista de hierbas que ayudan a disolver piedras renales
Estas se toman por un periodo de 20 a 30 dias previos a la limpieza hepática.
En caso de no tener vesícula es prioritario tomar por 20 días antes de la limpieza las mismas por el lapso recomendado.
Cualquiera de estos hierbas 30 %
Mejorana
Uña de gato
Raíz de consuelda
60 %
Achicoria
Uva ursi
Raíz de hortensia
Ulmaria
Semillas de hinojo
Raíz de malva
Vara de oro
Procedimiento: Mezclar bien y dejar cerrado.
Sumergir tres cucharadas de la mezcla en dos tazas de agua. (Antes de acostarse). Cubrir
Al despertar hervir la mezcla a fuego lento por 10-15 min.
Colar
Beber ocho porciones a pequeños sorbos durante el día a temperatura ambiente.
Algunas hierbas que ayudan alas funciones hepáticas.
Raíz de diente de leon
Raíz de regaliz
Raíz de ñame silvestre
Raíz de Polimnia
Cardo Mariano
Raíz de consuelda
Agrimonia
Corteza de Agracejo
Corteza de roble
hígado
Termómetro de la salud
Si todo anda bien, no tenemos motivo para darnos cuenta del trabajo del hígado: la digestión se realiza sin problemas y el cuerpo funciona normalmente. Por el contrario, los inconvenientes digestivos en general, suelen advertirnos que algo anda mal en el sistema hepatobiliar. Sin embargo, y dado que el hígado interviene en gran cantidad de funciones corporales, los síntomas de su mal función son muy variados y normalmente no se relacionan con su desorden funcional.
Un hígado cansado y sobrecargado genera gran variedad de síntomas físicos, como: dificultades para asimilar alimentos, inapetencia, dolores de cabeza luego de comer, boca pastosa, lengua blancuzca o amarillenta, sabor amargo en la boca, hinchazón de vientre, acumulación de gases, nauseas, vértigo, piel amarillenta, cutis graso, granos, catarro, estreñimiento, heces en forma de confites o poco consistentes y de color amarillento, insomnio en las primeras horas de la noche y dificultades para despertar por la mañana, picazón de piel, caspa, caída del cabello, migrañas, cefaleas, dolor en la nuca, síndrome premenstrual (catabolismo hormonal), fatiga muscular, edemas, calambres, mala circulación venosa, coloración verdosa del rostro y los ojos, fobia a la luz, dificultad para permanecer al viento, problemas de visión, afecciones oculares, precoz pérdida de la vista…
La relación hígado/visión, ampliamente conocida por la antigua medicina oriental y totalmente ignorada por la ciencia occidental, es fácil de verificar dado el estrecho vínculo entre ambos órganos y la rápida respuesta que se genera. Una depuración hepática, incrementa automáticamente la capacidad visual. Esto hemos podido experimentarlo personalmente y a través de testimonios impactantes: una persona nos refería haber tenido que desechar nuevos anteojos con mayor aumento, apenas después de haber concluido una primera limpieza hepática profunda.
Dos líneas verticales en el entrecejo, nos indican un hígado agotado. Cefaleas y migrañas aparecen cuando este órgano se siente afectado y no llega a desempeñar su función de empujar y distribuir la energía hacia la cabeza y las extremidades; entonces la cabeza se congestiona y se calienta, al mismo tiempo que las manos y los pies se enfrían.
Dado que el hígado es responsable de la formación de la albúmina y las hormonas, su mal función repercute directamente en los sistemas inmunológico y hormonal. Una alergia está indicando claramente que algo no marcha bien a nivel hepático. Es notable la rapidez con que remiten las reacciones alérgicas, una vez que hemos depurado el hígado.
Ya nos referimos a la relación albúmina defectuosa-células tumorales, por lo cual un cáncer no es más que el reflejo de un hígado colapsado. Y pensar que una persona con cáncer es sometida a potentes drogas que no hacen más que agravar el colapso hepático. En general puede afirmarse que todas las enfermedades crónicas y degenerativas reflejan el mal estado hepático o, mejor dicho, resultan su consecuencia directa.
La medicina oriental clasifica a hígado y vesícula como órganos pares, es decir que se afectan mutuamente: si está mal uno, también está mal el otro y viceversa. Los síntomas físicos del desorden vesicular son: dolores de caderas, migrañas (localizadas sobre todo en la sien derecha), boca amarga por la mañana, vómitos ácidos, tensiones en el hombro derecho, dolores en las articulaciones (rodillas en particular), cuello rígido, ansiedad e insomnio. El color de la piel suele ser pálido o amarillento, tonalidad que también se evidencia en los ojos.
HÍGADO Y EMOCIONES
El estado emocional y la claridad mental de una persona, dependen de la libre circulación de la energía y la sangre. Precisamente es el hígado quien controla ambos factores, y por tanto la estabilización del equilibrio emocional. Un hígado sano proporciona juicio claro y decisiones firmes; la acción que genera es rápida y consecuente. La emoción positiva de un hígado sano es el idealismo.
El bloqueo de la energía del hígado, crea un estado depresivo y de agobio. La tendencia psíquica negativa es la cólera, que se produce como reacción a la depresión y es acompañada por crisis de irritabilidad, mal humor, ira y violencia. Las crisis de cólera son normalmente reprimidas hasta el momento en el cual se liberan, desembocando en verdaderas erupciones volcánicas, con deseos de gritar y pegar. Esta emoción se considera la más dañina, pues condiciona todas las funciones del sistema energético, al alternarse euforia con depresión.
Los desequilibrios biliares se asocian con rigidez de pensamiento, cólera, excesiva preocupación por los detalles, frustraciones y miedo hacia lo desconocido. Decisiones y acciones quedan paralizadas.
Según la medicina tradicional china, el hígado es el “maestro de la astucia y de la acción”, así como la vesícula biliar lo es de la “fuerza de decisión”. La salud de ambos órganos determina la capacidad de ser un líder; es el “eterno ganador”. La capacidad de previsión, o sea de anticipar la realidad interior y exterior, depende de la salud del sistema hígado/vesícula.
LOS CÁLCULOS BILIARES
Como hemos visto, todo tiene que ver con la correcta función hepática. Nuestro laboratorio interno cumple gran cantidad de funciones y casi todo lo que ocurre en el cuerpo tiene que ver con su estado. A raíz del ensuciamiento alimentario y la consiguiente permeabilidad de la mucosa intestinal, grandes cantidades de sustancias inconvenientes alcanzan el hígado y generan un crónico colapso tóxico, que repercute en muchos ámbitos y que generalmente no es tenido en cuenta a la hora de abordar un problema concreto de salud.
Es el caso de los cálculos biliares, que se generan dentro de la estructura hepática (cálculos intra hepáticos). Pese a comprometer en grado sumo la eficiencia del hígado y sobre todo el correcto flujo de bilis, es un tema que la medicina alopática no atiende como debiera. Lo que aquí se propone, es sencillamente un método de limpieza para eliminarlos del cuerpo; esto permite recuperar la correcta funcionalidad del hígado y resolver graves desordenes crónicos.
Los cálculos intra hepáticos (como los que se aprecian en las fotografías) están constituidos por colesterol, fragmentos de bilis coagulados, calcio y pigmentos, como la bilirrubina. Además tienen desechos coloidales (moco), toxinas, bacterias y parásitos muertos. Siendo el colesterol el principal ingrediente, son poco perceptibles en la tecnología de diagnóstico por rayos o ultrasonidos. A lo sumo, en muchos casos se diagnostica a la persona como hígado graso (aparecen zonas blancas en los exámenes por ultrasonidos). Es posible que una persona con este diagnóstico tenga cientos o miles de piedras de distintos tamaños, alojadas en su hígado.
Imagen simplificada que muestra los cálculos alojados en los conductos biliares del hígado, en la vesícula y en el conducto que transporta la bilis hacia el intestino. Notar que dicho conducto descarga en el mismo lugar que el páncreas (círculo). Por tanto su obstrucción, afecta el arribo de ambos fluidos al intestino.
No debemos confundirnos con los cálculos vesiculares, ya calcificados, que se detectan sencillamente con radiografías y que generan reacciones dolorosas, las cuales concluyen con intervenciones que “mutilan” este órgano importante de la función digestiva e intestinal. Los cálculos en la vesícula deben ser considerados apenas la “punta del iceberg” respecto a lo que se encuentra alojado en el hígado.
Las personas con enfermedades crónicas, seguramente tienen centenares de cálculos obstruyendo los conductos biliares intra hepáticos. La bilis es un fluido amarillo verdoso y alcalino, esencial en la química corporal. Además de colaborar en los procesos metabólicos de grasas, proteínas y minerales, la bilis mantiene el orden de las grasas en sangre, elimina material tóxico del hígado, alcaliniza los intestinos y evita la proliferación de microorganismos nocivos en el colon, entre otras cosas.
Una persona saludable produce aproximadamente un litro diario de bilis. En cambio, individuos con cálculos biliares y enfermedades crónicas, llegan a producir apenas un tercio o menos de esa cantidad. Por lo tanto serán personas con mala digestión del alimento (dispepsias), desorden en los triglicéridos, acidificación intestinal, toxicidad hepática, desorden en la flora del colon, etc.
Síntomas de presencia de cálculos biliares
• Acidez estomacal
• Adormecimiento o calambres en piernas
• Alzheimer, Parkinson, trastornos cerebrales
• Artritis y gota
• Asma
• Cabello graso o calvicie
• Carencia vitamínica
• Colesterol elevado
• Congestión linfática
• Debilidad
• Desorden hormonal
• Diabetes
• Dolores de espalda y hombros
• Escoliosis
• Evacuaciones claras
• Extremidades frías
• Gastritis
• Hemorroides y várices
• Hepatitis y cirrosis hepática
• Impotencia sexual
• Infecciones (cándidas, herpes)
• Inflamación vesicular
• Irritabilidad y cólera
• Mala digestión
• Manchas en piel (brazos, espalda, rostro)
• Mareos y desmayos
• Obesidad
• Ojos hinchados y/o amarillentos
• Osteoporosis
• Pancreatitis y tumores pancreáticos
• Pesadillas
• Piel amarillenta
• Problemas circulatorios y cardíacos
• Problemas de visión
• Problemas dentales o de encías
• Problemas intestinales
• Problemas renales y urinarios
• Rigidez articular y muscular
• Sabor amargo en boca
• Tono oscuro y “bolsas” bajo los ojos
• Ulceras y aftas bucales
• Adormecimiento o calambres en piernas
• Alzheimer, Parkinson, trastornos cerebrales
• Artritis y gota
• Asma
• Cabello graso o calvicie
• Carencia vitamínica
• Colesterol elevado
• Congestión linfática
• Debilidad
• Desorden hormonal
• Diabetes
• Dolores de espalda y hombros
• Escoliosis
• Evacuaciones claras
• Extremidades frías
• Gastritis
• Hemorroides y várices
• Hepatitis y cirrosis hepática
• Impotencia sexual
• Infecciones (cándidas, herpes)
• Inflamación vesicular
• Irritabilidad y cólera
• Mala digestión
• Manchas en piel (brazos, espalda, rostro)
• Mareos y desmayos
• Obesidad
• Ojos hinchados y/o amarillentos
• Osteoporosis
• Pancreatitis y tumores pancreáticos
• Pesadillas
• Piel amarillenta
• Problemas circulatorios y cardíacos
• Problemas de visión
• Problemas dentales o de encías
• Problemas intestinales
• Problemas renales y urinarios
• Rigidez articular y muscular
• Sabor amargo en boca
• Tono oscuro y “bolsas” bajo los ojos
• Ulceras y aftas bucales
Factores generadores de cálculos biliares
• Sobrealimentación
• Cenas copiosas
• Exceso de proteínas
• Ingesta de almidones sin procesar
• Consumo de lácteos
• Aceites industrializados y margarinas
• Alimentos refinados (sal, azúcar, harinas)
• Colesterol oxidado (leche y huevo en polvo)
• Productos bajos en grasa (Light)
• Alimentos con conservantes
• Adelgazamientos rápidos
• Deshidratación
• Empleo de anticonceptivos
• Terapia de sustitución hormonal
• Fluorado del agua
• Uso de fármacos
• Alteración de los ciclos naturales (día/noche)
• Exceso de televisión
• Estrés emocional (causa/consecuencia)
• Cenas copiosas
• Exceso de proteínas
• Ingesta de almidones sin procesar
• Consumo de lácteos
• Aceites industrializados y margarinas
• Alimentos refinados (sal, azúcar, harinas)
• Colesterol oxidado (leche y huevo en polvo)
• Productos bajos en grasa (Light)
• Alimentos con conservantes
• Adelgazamientos rápidos
• Deshidratación
• Empleo de anticonceptivos
• Terapia de sustitución hormonal
• Fluorado del agua
• Uso de fármacos
• Alteración de los ciclos naturales (día/noche)
• Exceso de televisión
• Estrés emocional (causa/consecuencia)
Este armado fue armado por Alicia Bersi con bibliografía de el libro de Andreas Moritz , la recopilación de Nestor Palmetti y Andre Van Lizebeth.
Jala Neti
La limpieza nasal yóguica (Jala Neti) es una de estas técnicas purificatorias conocidas desde hace milenios y se utiliza para limpiar las cavidades nasales. Es una técnica muy sencilla, práctica, segura y de gran utilidad para el occidental, ya que permite incrementar la capacidad respiratoria (cantidad y calidad).
Beneficios :
- Facilita y mejora la respiración nasal.
- Mejora la salud de ojos nariz y oídos.
- Aumenta la resistencia al resfrío y gripe.
- Elimina la suciedad de las mucosidades además de bacterias y residuos acumulados en las fosas nasales
- Muy útil en el tratamiento de dolencias como: asma, sinusitis, bronquitis, neumonía, migraña, ansiedad etc.
- Ayuda a sentir el aire fresco y puro, incrementando la energia vital .
- Equilibra la s condiciones de temperatura y humedad que la nariz necesita para funcionar adecuadamente.
- Alivia tensiones mentales
Procedimiento:
Hervir agua . Si es filtrada mejor.
Llenar la vasija nasal hasta que el agua asome por el pico.
Verter una pizca de sal marina o sal de roca dentro de la vasija nasal. Revolver durante 30 segundos aproximadamente hasta disolver la sal.
Testear agua con dedo minique o sobre la muneca.
Precauciones:
Probar la temperatura del agua con la yema del dedo meñique o con la parte interna de la muñeca
No obstruir una de las fosas nasales con el dedo para luego exhalar violentamente por la otra.
Tapar sus oidos con los dedos al exhalar fuerte como para no lastimarlos.
Con el cuerpo ligeramente inclinado hacia delante, introducir el pico de la vasija en la narina que esté más destapada. La boca permanece abierta. Inclinar la cabeza y dejar que la solución penetre por la fosa nasal hasta que salga por la fosa libre. Regular el ángulo de inclinación de la cabeza a efectos de mejorar la circulación de la solución; de esa manera adquiere velocidad y libera obstrucciones dentro de la nariz.
Después de un cuidadoso lavaje, tenemos el proceso de secado. Es tan importante como el proceso de lavado y debe dedicársele un tiempo. Una vez finalizado el lavaje de ambos lados colocar el torso hacia delante- casi paralelo al piso- inclinar la cabeza, primero hacia un lado y luego hacia el otro, dejando escurrir ambas narinas. Es recomendable una duración mínima de 30 segundos por lado y exhalar al principio en forma suave. Luego con la cabeza al frente inhalar de manera pasiva y exhalar de forma enérgica, de manera rítmica, por ambas fosas nasales durante un par de minutos. Esto completa el secado.
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